martes, 15 de abril de 2008

Kloster regresa y ataca de nuevo



Se lo tengo dicho: Kloster, no hables de política, que me pierdes. Pero esta vez escribe desde alguna playa del Caribe, donde se recupera de su ataque de melancolía, y no me he atrevido a censurarle el texto. He aquí lo que dice:




Estoy encantado. Ya tenemos un Ministerio de Igualdad, y estoy seguro de que muy pronto habrá otro de Libertad y un tercero de Fraternidad. Cada una de las tres grandes palabras que conforman la divisa de la Revolución Francesa merece su correspondiente ministerio. Y los tres ministros o ministras predicarán piadosas homilías desde los medios públicos y ordenarán a los ciudadanos que sean siempre iguales, libres y fraternos. ¡Qué bonito!

El Ministerio de Igualdad tendrá muy pronto una subsecretaría de Distinción para que quede claro que somos iguales, aunque distintos. Nos enseñarán a ser diferentes sin dejar de ser lo mismo. O sea.

Gracias al ministerio de Libertad aprenderemos a pensar por libre, pero sin exagerar, o sea sin necesidad de visitar este blog. La subsecretaría de Responsabilidad procurará que nadie se desmande.

Pero yo me pido el tercer ministerio, el de Fraternidad, que servirá para hacernos hermanos por decreto. La canción de la alegría, interpretada por Miguel Ríos, será himno oficial del Ministerio. Vibraremos todos entonando aquello de:
"Escucha hermano la canción de la alegría, el canto alegre del que espera un nuevo día. ¡Ven, canta, sueña cantado, vive soñando el nuevo sol en que los hombres volverán a ser hermanoooos!"
Será maravilloso, querido kolega. Creo que ya he superado la astenia primaveral.

Heinz Kloster.

7 comentarios:

Juanan dijo...

Si George Orwell levantara la cabeza se partiría de la risa. Dentro de nada ya tenemos el Ministerio del Amor, el Ministerio de la Paz, el Ministerio de la Abundancia y el Ministerio de la Verdad.

Nuevepornueve dijo...

Uy... yo creo que en esas tierras caribeñas Kloster está descubriendo el Ron que bebía aquel antepasado suyo marino que estaba orgullosamente tatuado.

Pues... ¡Buena mar, Kloster!

c3po dijo...

Kerido Kloster: Si regresas por mar, que sería lo suyo viniendo del Karibe, te deseo “Mar calmo, viento largo, estrella clara”, que fue el deseo de los Reyes de España para Cristóbal Colón.
Y yo, añado de mi cosecha: que la Virgen del Carmen te acompañe y te devuelva sano y salvo a buen puerto, marinero!

Anónimo dijo...

D. Enrique: no se ofenda pero Kloster es de lo mejor que tiene en el blog (bueno, también las fotos, como dice Amaia).

Anónimo dijo...

Los funcionarios del Ministerio de la Igualdad...¿trabajarán IGUAL que el resto de funcionarios o IGUAL que el resto de trabajadores?

Anónimo dijo...

Pues si ha estado en el Caribe, fijo que llega de lo más relajado. Y ya buscará la fórmula para montar un Ministerio que combata el estrés. Y el himno podría ser "Poquito a poco" de Chambao. ¿Qué te parece, Kloster?

Anónimo dijo...

D. Enrique: Desde que está en el campo todavía está "más sembrado". Esta entrada es genial (de Kloster tenía que ser), desde el título hasta la última frase.
¿Y la foto? Merece un comentario especial. ¿De dónde ha sacado a esas preciosas negritas, engalanadas con traje blanco, que yo diría que es de 1ª Comunión? Ha sido una buena compensación por dejarnos sin la foto de la ventana cuajada de flores.
Me da muchísima envidia que esté disfrutando del silencio y la belleza de la naturaleza en ese pueblo tan bonito. Aquí en Madrid, las calles de mi barrio están todas abiertas en zanjas.
¡Descanse!!!